miércoles, 26 de diciembre de 2012

¿Cómo inflar los balones?

M.A. Gómez



Hace unos días me han regalado un balón de playa que, realmente, son dos balones. Me explico: es un balón transparente grande que en su interior lleva otro balón más pequeño. Cada uno de ellos, como puede verse en la foto, tiene su propia válvula para inflarlo (indicadas por la flecha de color rojo). Estas válvulas dejan entrar aire, pero no lo dejan salir, salvo que se presionen en una determinada posición. En la foto vemos cómo queda el conjunto después de inflado.


El problema que se me plantea es: ¿cómo inflo los balones? No es lo mismo comenzar por uno que por otro. ¿Por cuál tenemos que empezar? Hay que tener en cuenta que las válvulas de inflado dejan entrar el aire, pero no lo dejan salir.

¿Cuál es el orden adecuado para comenzar a inflar los balones? ¿Por qué?

Para desinflar los balones hay que tener presionadas las válvulas con los dedos, a la vez que se presiona sobre el balón. Poco a poco se consigue sacar así el aire.

¿Cuál es el orden que seguirías para desinflar los balones? ¿Por qué?



                                          El rincón de la ciencia, nº 66 febrero 2014

sábado, 22 de diciembre de 2012

¿Superó la barrera del sonido?



A. Cañas


El día 14 de Octubre del 2012 Félix Baumgartner saltó desde la estratosfera a una altura de 39.068m. Según el artículo de el diario El Mundo http://www.elmundo.es/elmundo/2012/graficos/oct/s1/salto.html, Félix rompió la barrera del sonido cuando iba a 1.110 km/h.

Sabemos que superar la barrera del sonido implica alcanzar una velocidad superior a la que se desplaza el sonido. También sabemos que la velocidad del sonido en el aire es de 340 m/s. Surge así la pregunta:

¿Realmente Félix Baumgartner llegó a superar la barrera del sonido?

Puedes obtener más información a partir del vídeo de la caída https://www.youtube.com/watch?v=MFMjhCgyUsY , en el que es factible tomar bastantes datos del recorrido.

¿Tienes una respuesta?
                                                     El rincón de la ciencia nº 63, diciembre 2012
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